El bocashi es un abono orgánico de origen japonés, hecho a partir de desechos, mediante una fermentación (descomposición anaerobia) de la materia orgánica, llevada a cabo por medio de los microorganismos benéficos o eficientes (EM), en un tiempo muy inferior al compostaje u otras formas de tratamiento de residuos. Otra gran ventaja que tiene hacer bocashi, es que permite utilizar materia orgánica muy diversa. Esto facilita al agricultor la fabricación de enmiendas orgánicas, partiendo desechos gratuitos que tiene a su propio alcance «in situ».
La fermentación puede llevarse a cabo en pleno suelo, aunque es mucho más eficiente utilizar sacos, bolsas, o, mejor aún, bidones con tapa hermética. Y esto es así porque el oxígeno suele arruinar el proceso de fermentación, por la llegada de microorganismos aerobios, distintos a los benéficos (facultativos), que son lo que realizan este abono de forma natural. La expulsión o erradicación de patógenos, se lleva a cabo mediante una acidificación muy alta del medio. Acidificación que realizan estas bacterias y microorganismos antioxidantes.
La relación de carbono/nitrógeno, el tamaño de las partículas y el inóculo de una buena solución madre de microorganismos eficientes, son las claves del éxito. Concretamente los EM, o micro organismos eficientes, son un conjunto de bacterias y microorganismos que actúan conjuntamente en nuestro bocashi, cooperando entre sí, en una simbiosis natural perfecta. Básicamente, estos microorganismos eficientes son las levaduras (fermentos), bacterias acido lácticas y fotosintéticas. Pueden ser adquiridos en el comercio, pero los que tratamos residuos solemos cultivarlos de forma autónoma y autosuficiente, no es algo difícil.
Los agroquímicos y abonos minerales (sales) generan radicales libres, lo que redunda en una llegada de plagas y enfermedades. La naturaleza siempre trata de equilibrar de forma automática los desequilibrios. Aportar abonos sintéticos, muy fuertes en NPK, atrae rápidamente a los insectos y microorganismos patógenos (oxidantes). Por eso el bocashi interviene siempre de forma favorable, y estimula a la planta, nutriendo a los microorganismos del suelo, que son los que ayudan a las plantas (seres autótrofos), para que éstas puedan fabricar su propio alimento, mediante el proceso de la fotosíntesis.
¿Qué aplicaciones tiene el bocashi?
Por si todo esto fuera poco, el bocashi tiene múltiples aplicaciones, en agricultura, como antioxidante natural y abono orgánico. En bioconstrucción. En el tratamiento de aguas residuales, charcas, lagunas. Así como en ganadería, facilitando la inmunidad de los animales y reduciendo la transmisión de enfermedades en establos y granjas. En última instancia, nosotros lo hemos utilizado también en lombricultura con un gran éxito. Aumenta significativamente la población de nuestras lombrices y constituye un alimento para ellas muy rico en azúcares, proteínas y aminoácidos.
Desde El Lombricero, intentamos aportar mucha información interesante acerca de tratamiento de residuos, y que pueda ayudarte en tu huerto o en tu jardín. Si quieres conocernos accede a nuestra página de inicio o si quieres conocer nuestros productos accede al área de servicios, si prefieres contactar con nosotros utiliza nuestra sección de contacto. Y ahora te dejamos con este vídeo sobre bocashi. Espero verte a menudo por aquí. Muchas gracias por tu apoyo y confianza.